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CCOO de Industria daba esta mañana el pistoletazo de salida a la concentración a las puertas del Ministerio de Industria con la satisfacción de haber cumplido el primero de los objetivos que se propuso alcanzar al convocar la protesta: Tras exigirlo sin éxito durante meses, el sindicato tenía la certeza de que la cartera que dirige Reyes Maroto convocará a la mesa del auto, de forma urgente, a lo largo de los próximos días. “La política está para dar soluciones”, recordó su secretaria general.
La movilización ha conseguido que, en breve, sindicatos, patronal y ministerio se sienten a analizar lo que está ocurriendo en un sector del que comen tres millones de trabajadores y trabajadoras y que aporta el 10% del PIB. Para CCOO de Industria es urgente abordar los estragos que la crisis de los semiconductores, el aprovisionamiento de materias primas, los problemas logísticos y la electrificación de la movilidad están provocado en el auto.
En declaraciones de Julian Teso secretario general de CCOO Industria Madrid, mostro su preocupación ante la situación por la que estaba pasando el sector del auto debido a la falta de planificación por parte de las diferentes administraciones, tanto de la Comunidad de Madrid como por parte del Estado de nuestro país.
Julian Teso continuó su intervención poniendo especial atención en la grabe crisis de componentes producida por la falta de suministro de semiconductores que puede tener unas nefastas cosecuencias para el empleo en nuestra comunidad
Según lo explicó la secretaria general de CCOO de Industria a los medios de comunicación que cubrieron esta mañana la movilización, el sindicato lleva meses diciendo que de poco iba a servir el PERTE que en junio presentó la Moncloa para electrificar y descarbonizar la cadena de la movilidad, si no se contaba con la participación de los sindicatos. “Las y los trabajadores sufren ya las consecuencias de un PERTE que se gestó sin perspectiva social”, denunció.
Garbiñe Espejo se refería a la pérdida de quince mil empleos en la industria del auto desde que arrancó el verano. Recordó a los medios que las y los trabajadores sin contrato fijo fueron los primeros en sufrir las consecuencias de la tormenta perfecta que se ha generado en el sector al caer la producción. “Más allá del PERTE, el sector necesitaba, a corto y a medio plazo, medidas para revertir la situación”. Unas medidas que, lamentablemente, todavía no han llegado. La secretaria general de CCOO de Industria recordó la presencia en la concentración de los trabajadores y las trabajadoras de Pilkington, empresa de componentes de auto de Sagunto (Valencia) que vive amenazada por la deslocalización.
La sindicalista también mencionó a las y los periodistas el cierre de MAHLE, otra empresa del sector que, ante la profunda transformación que vive la industria del auto, amenaza con cerrar la planta de Vilanova (Barcelona) y dejar en la calle a cerca de cuatrocientas personas. Garbiñe Espejo exige medidas como los ERTES, que se pusieron en marcha durante la crisis sanitaria del COVID, para evitar la pérdida de empleo en la cadena de movilidad.